Rallar los 100 gramos de queso.
Cortar en trozos pequeños las nueces.
Engrasar con mantequilla la totalidad del molde donde prepararemos la capirotada.
Untar mantequilla sobre un solo lado de las tortillas frías y colocarlas dentro del molde hasta cubrir todo el fondo. Las tortillas evitan que se pegue la capirotada si no tienes un refractario o molde antiadherente.
Tomar los panes horneados uno por uno y sumergirlos en la leche. Luego, acomodarlos en el molde sobre las tortillas frías.
Mojar la parte superior de los panes con un poco de leche y añadirles la mitad del queso rallado, la mitad de cacahuates, la mitad de las pasas de uva y las nueces troceadas.
Repetir el procedimiento con los panes y, uno por uno, poner una nueva capa de pan sumergidos en la leche sobre el molde. Luego, remojar con leche una vez más la parte superior de cada pan. Agregar el resto del queso rallado, los cacahuates, las pasas de uva y las nueces troceadas.
Envolver el molde en papel aluminio y llevarlo al horno durante 20 minutos.
Pasados los 20 minutos, retirar el papel aluminio y dejar cocinar por 10 minutos más.
Retirar del horno y dejar enfriar por 5 minutos. Emplatar.