El granito es actualmente uno de los materiales más empleados en el diseño de mesetas para cocinas e inclusive baños, puesto que sus colores y estilo destacan por ser muy atractivos y elegantes.
Más allá de la estética, las mesadas de granito también se caracterizan por una alta durabilidad y eficiencia: aguantan altas temperaturas, resisten grasa y agua, y son menos probables a rayarse o mancharse.
Aun así, el mantenimiento y limpieza son hábitos esenciales para preservar estas cualidades. Por ello, hoy te traemos una guía completa sobre cómo debes cuidar una meseta de granito y evitar daños.
¿Cómo se limpia el granito?
Como ya mencionamos, si deseas mantener las características funcionales y estéticas de tu granito, debes encargarte de darle limpieza constantemente. De lo contrario, este material irá perdiendo su brillo y tornándose opaco, e incluso puede mancharse.
Las mesetas de granitos son productos de alta calidad, pero no son invulnerables. ¡No lo olvides! Por ello, cualquier sustancia abrasiva debe mantenerse lejos de ellas. Incluso métodos de limpieza que emplean vinagre o cítricos no son recomendados para el granito.
Para limpiar de forma apropiada una mesada de granito haz lo siguiente:
- Prepara tus materiales: vas a usar un trapo de microfibra o una esponja suave, y jabón neutro o de trastes.
- Haz una mezcla del jabón que escogiste con un poco de agua tibia. El agua no debe estar muy caliente.
- Humedece tu trapo o esponja con la mezcla y limpia toda la superficie y los laterales con movimientos circulares.
- Después, seca el granito con un trapo limpio.
- Para finalizar, rocía en la meseta sellador para granito.
- No le coloques nada encima durante un día entero para que haga efecto el sellador.
¿Cómo quitar manchas persistentes?
Ahora, aunque no es muy común, el granito puede sufrir de manchas difíciles de quitar. Estas pueden deberse por excesiva humedad, por restos de comida adheridos o por presencia de sarro.
Existen opciones de limpieza más agresivas para deshacerse de estas manchas. Sin embargo, no se recomiendan llevarlas a cabo frecuentemente ni en extensas áreas. Solo empléalas cuando sea necesario.
Para remover manchas difíciles de granito, puedes hacer lo siguiente:
- Limpiar con un poquito de cloro y agua.
- Usar agua caliente con jabón para trastes.
- Hacer uso de un vaporizador de mano.
- Remover pedazos solidificados con un filo.
- Mezclar bicarbonato de sodio con agua oxigenada y dejarlo actuar durante una hora sobre la mancha.
Consejos para el cuidado del granito
Ya hablamos de la forma adecuada para limpiar y pulir tu mesa de granito, así como las medidas a tomarse si necesitas eliminar manchas persistentes. Sin embargo, debes recordar que el cuidado de tu meseta no termina ahí.
Para mantener en buen estado el granito no debes limpiar solamente cuando está visiblemente sucio. Al contrario, debes, aunque sea, seguir a diario los siguientes consejos para alargar la productividad de tu mesada.
- No cortes alimentos directamente sobre la superficie del granito.
- No arrastres trastes ni herramientas de cocina porque puedes rayar la meseta.
- Prevé posibles manchas: no dejes que se humedezca en demasía.
- No expongas el granito por mucho tiempo al calor porque contribuye a que se opaque.
- No uses líquidos abrasivos, cítricos ni vinagres sobre la mesada.
Eso es todo lo que necesitas saber para mantener brillante y funcional el granito de tu cocina. ¡No olvides mínimo pasarle un trapito limpio cada vez que lo uses!